Además de la experiencia, una de las habilidades principales más importante de liderazgo es poseer un verdadero líder es el de poder comunicarse de manera asertiva con los demás. Y es que si posees esta habilidad, podrás llevar a buen puerto todos los proyectos que se te asignen, ya que sabrás cómo guiar a tu equipo de trabajo por el sendero del éxito.
Ser asertivo implica no es ser un líder autoritario, pues al saberte comunicar efectivamente con el resto de tus compañeros sabrás no solo como dirigirte a ellos sino también, escucharlos y establecer estrategias basándote en diferentes opiniones.
Sin embargo, debes tener en cuenta de que la comunicación asertiva no es algo innato, sino que hay que trabajarlo y apoyarse en tecnologías, ya que la actual era digital demanda también liderazgos en línea.
¿Qué hábitos debes tener para convertirte en un buen líder?
• Evita ser un jefe
A pesar de que muchas personas suelen confundir el término “jefe” con “líder” la realidad dista mucho de ello. Si tienes vocación para ser un líder, evita caer en las rutinas propias de un jefe:
• Dar órdenes todo el tiempo.
• Suministrar información incompleta o incoherente.
• Dar cargas de trabajo estresantes o agotadoras casi todo el tiempo.
• No delega cargas de trabajo y no se involucra en ello.
• Asigna nuevos trabajos sin dar previamente instrucciones sobre cómo realizarlos.
• No suele compartir con el equipo de trabajo.
Un secreto adicional de liderazgo es ayudar en la medida de lo posible al resto del equipo cuando hay muchas cargas de trabajo. Por ello, es mejor decir “vamos” que “Ve”, “tienes parte de razón” que “estás completamente errado”.
Ten siempre presente que, antes de que fueses un líder, en algún momento fuiste colaborador. Por ello, siéntete más como alguien cuya experiencia permitirá que otros crezcan profesionalmente.
• Piensa a largo plazo
Como líder, tu visión siempre debe ser a largo plazo en cualquier proyecto que se esté ejecutando o planificando. Esto te permitirá no solo prever situaciones o resultados a futuro, sino también inspirar e involucrar a todo tu equipo de trabajo e inclusive, a personas que posiblemente vayan a participar en el proyecto de manera autónoma.
Esto no significa que debes despreocuparte del presente, ya que por obviedad debes estar al tanto de como marchan las cosas. Sin embargo, debes tener en todo momento una visión clara de futuro.
• Comunícate con un lenguaje cercano
Una comunicación asertiva no significa que debas hablar más fuerte que los demás, emplear un tono imperativo o usar frases u oraciones con palabras muy elaboradas. Recuerda que al difundir una información, debes darla de la manera más clara, sincera y cercanamente posible; no importa si esta es positiva o negativa.
Por cierto, un error muy común que suelen cometer quienes están en posición de liderazgo es comunicar sus ideas o informaciones con muchos tecnicismos o palabras muy elaboradas. Esto, sin duda, generará será mayor confusión y más aún si tu equipo de trabajo no maneja este tipo de lenguaje. ¿Recomendación? Hablar de la manera más cercana posible sin caer en la chabacanería o el coloquialismo extremo.
• Antes de liderar tu equipo, lidérate a ti mismo
¿Cómo podrías llegar a liderar eficientemente un equipo de trabajo, si no te lideras a ti mismo? Para poder guiar a un equipo de trabajo no solo te bastará tu experiencia y destrezas, sino que además debes desarrollar conductas de emprendedores y controlar, de manera inteligente, tus emociones.
Por ende, el autoconocimiento y la autodidáctica juegan un papel muy fundamental en la formación de un verdadero líder. Ten presente que para desarrollarte como líder debes crecer continuamente tanto personal como profesionalmente.
• Innovar en la manera de comunicarse con los demás
La innovación debe ser una conducta clave a la hora de asumir el liderazgo de un o varios equipos de trabajo. No todas las personas se sienten a gusto debatiendo o dando sus opiniones en las reuniones tradicionales y es allí donde debes apoyarte en las tecnologías. Las actuales soluciones empresariales brindan numerosas herramientas para mantener una comunicación efectiva no solo con el personal interno de la organización, sino también, con clientes potenciales externos.
Así, por ejemplo, puedes coordinar encuentros casuales virtuales a través de Meet, Microsoft Teams, Zoom, etc. También puedes usar redes sociales como Telegram o WhatsApp para nutrirte con feedbacks de manera más personalizada e individual. Así, también sabrás cómo poderte comunicar efectivamente con cada miembro de tu equipo de trabajo.
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